La noche de los blancos de pie
10 años atrás, pocos meses después de la mundialmente mediatizada rebelión de las banlieues (suburbios) del 2005, hubo una movilización esencialmente estudiantil en Paris. Ya era en contra de una ley para “ayudar” los jóvenes a conseguir trabajo según los gobernantes –para explotarlos más aún que los demás según la realidad-. En el marco de las revueltas se ocuparon varias instituciones universitarias y la más emblemática de esas okupas ha sido la de la EHESS (Escuela de Altos Estudios en Ciencias Sociales) en la que se abrió una asamblea de palabra libre (sin turno de palabra ni orden del día) que duró una semanita hasta que la policía vino a sacarnos.
Un día un estudiante llamó a que
la asamblea se junte con los jóvenes de la banlieue, explicando que ellos eran
a la vez más explotados y más combativos que nosotros, doble razón para tratar
de establecer lazos entre las dos rebeldías. Recibió unos aplausos entusiastas
pero unos chicos le contestaron de inmediato, diciendo que la única relación
que iban a poder establecer con los jóvenes de la banlieue es que les roben sus
teléfonos celulares después de darles un par de trompadas. Los dos chicos que bajaron
así los ánimos de la asamblea explicaron que ellos eran de la banlieue y,
precisamente, trabajan con los jóvenes de ahí, por lo que alguna legitimidad
tenían para hablar del caso.
Diez años después, no creo que la situación de relegación de los barrios haya mejorado nada, todo lo contrario, se profundizó. Los asamblearios de la #NuitDebout están conscientes de que muy pocos negros y árabes de los conurbanos parisinos participan de sus asambleas, y algunos tratan de remediar esta terrible ausencia con llamados a que se multipliquen las asambleas en los barrios. Es una iniciativa de mucho interés en la que el movimiento juega su credibilidad y definirá por buena parte su potencia futura. Pues no puede haber un movimiento con esas aspiraciones igualitarias sin la participación de los barrios populares.
Pero esa convergencia –el gran
lema de la NuitDebout es “la convergencia de las luchas”- no será nada fácil. El
racismo, el abandono de las infraestructuras y la destrucción de todos los
ligazones sociales a través de una gestión policial de los barrios crearon
muros que aunque invisibles son a veces tan infranqueables como los verdaderos
construidos en Palestina por las fuerzas coloniales. Pero si se logran juntar
esas clases medias – “bobo” (de burgués bohemio)- de la Place de la République
con los relegados de los suburbios, al gobierno solo le quedara llamar al
Ejercito y no es seguro que gane.
Unos días atrás, un joven de la
banlieue decía en la asamblea de la NuitDebout de la Place de la République: “en
el 2005, decretaron el Estado de Emergencia en la banlieue y vosotros los bobos
no dijeron nada. Pero hoy en día estamos todos bajo Estado de Emergencia.” La
convergencia quizás no este tan lejos…
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