Chalecos y Extrema-derecha I & II


30 de diciembre

Desde el principio, e incluso antes del principio, de los Chalecos Amarillos hay denuncias proveniente de las izquierdas y del gobierno por la participación de la extrema derecha en el movimiento. No es que no exista el problema, los insultos racistas, homofóbicos, sexistas etc. son innegables, es que el problema esta muy mal plantado. Es evidente que cualquier movimiento popular en la Europa actual es necesariamente atravesado por expresiones y sentimientos ultra-derechistas, no en vano domina este discurso desde más de 30 años (en el caso francés precisamente).
Quedarse ahí, en la pura denuncia, y apartarse seria un poco como si un revolucionario del 1789 dijera “miren, chicxs, acá veo gente que aún le quiere al rey, yo no me meto”. Quedarse en esa denuncia seria cegarse sobre los posibles que se abren en una situación insurreccional. Peor aún esa denuncia impide ver la amplitud real del problema de la extrema derecha que no se limita a Le Pen y los ultras (de derecha revolucionaria, de derecha monárquica, de derecha neo-antisemita, y un sinfín de prosperas familias que abren sucursales todo los días en Europa). La extrema-derecha se incierta en el conjunto del escenario político francés, ya que este gira alrededor de este polo desde la mitad de los años 80.
De manera que si se quiere tomar el problema con un poco de seriedad, hay que identificarla en cada una de las formaciones políticas desde el Front National hasta la France Insoumise (organización de izquierda liderada por un ex cacique del Partido Socialista), y aceptar que sus ideas atraviesan casi toda la sociedad. Y, obviamente, si se quiere denunciar la extrema-derechización de Francia, entonces lo primero que hay que apuntar es su Estado.






7 de enero

En algún momento haré el mapeo de los grupos y partidos de extrema-derecha, pero la derechización más virulenta actual es la del gobierno francés que no le temé a ninguna escala de la violencia, con tal de quedar al poder.
Macron no responde a ningún peligro de una toma de poder por la violencia, el movimiento de Chalecos Amarillo se caracteriza más bien por un grado muy bajo de violencia (característica que es opacada por la sobreexposición de las escenas de conflictos directos). Eso por un lado, y por el otro Macron tiene cheque en blanco para apagar cualquier demanda social con reservas ilimitadas. Para entender este punto, basta con recordar la reacción de la Comisión Europea (el gobierno de la Comunidad Euro) que, al ver peligrar el soldado Macron anunció que Francia podía perfectamente abstraerse de la santísima regla monetaria que obliga a los países europeos tener presupuestos con déficit inferior al 3% de sus PIB (es la regla con la cual se tortura desde años a Grecia y que se rechazó el presupuesto italiano actual). Es decir, Macron tiene la banca atrás de él, y ella esta dispuesta a pagar lo que sea para guardarlo, sin importar violar todas las reglas que ella misma convirtió en leyes de hierro.
¿Por qué este apoyo incondicional? Porque une sublevación popular triunfante en Francia es la peor pesadilla que pueden imaginar: si eso pasaría hoy, antes de junio todos los pueblos europeos serian ingobernables.
Entonces, el Estado francés esta muy lejos de peligrar por las manifestaciones fluorescentes por un lado y, por el otro tiene barra libre para apagar conflictos sociales con dinero. ¿por qué Macron elije el conflicto a palos y disparos? Macron es el niño mimado de la banca, un sueño del índice bursátil hecho realidad. Pero si apaga el conflicto restableciendo derechos para trabajadores, invirtiendo en servicios públicos, etc., entonces dejaria de ser el caballero del capitalismo triunfante para volverse otro inoportuno que hay que recambiar cada 5 años. Para Macron aplastar el movimiento es asegurarse quedar en el poder los 10 próximos años, esta en la misma situación que Tatcher con los mineros al principio de los 80.
Por eso, el gobierno en vez de conciliar anuncia más “radicalidad” (es su portavoz que lo dice). Para quedar como el Elegido del liberalismo, Macron va a seguir derechizando el Estado con leyes cada vez más infames y una represión desatada.


Comentarios

Entradas más populares de este blog

Informe dominguero, 6 de enero

Todo el poder a las corporaciones