El virus y la urgencia
En los últimos días se difunde en redes una
carta abierta de un biólogo francés. Su testimonio no es original ni sorprendente:
va contando como, casi veinte años atrás, su equipo de investigación llegó, por
casualidad, a investigar la familia de los coronas virus y como, a pesar del interés
e entusiasmo del equipo por este objeto de estudio tuvieron que abandonarlo por
falta de financiación. Unos managers decidieron que era un objeto de poco valor
agregado y ningún rendimiento a la vista.
El managment tiene una temporalidad indexada
sobre los flujos de capitales, es decir cada vez más corta, y objetivos
definidos según la proyección de sus rendimientos adentro de esa temporalidad.
La investigación tiene otra temporalidad y no puede tener objetivos predefinidos,
sino una vaga brújula.
La investigación va deambulando y errando, y de deambulo
en deambulo termina comprobando que su camino era errado o, pocas veces,
certero. El manager no erra nunca, porque va buscando lo que ya existe. Su
campo de proyección es el presente por lo que su futuro es un presente al que
agrega una curva ascendiente (su futuro es un presente + unas ganancias en
dinero, jamás otro camino). El managment es antinómico con la investigación. Por
más que su marketing solo habla de “innovación”, estructuralmente no puede innovar
y mucho menos descubrir, ya que es prisionero de lo existente y las ganancias
de sus accionistas.
Entonces la pregunta con el corona virus es
si la urgencia es encontrar un remedio a la gripe o si hay que erradicar al
management que no tiene remedio.
Comentarios
Publicar un comentario